Tuesday, June 12, 2007


Finalmente voy a empezar a platicarles sobre mi aventura al otro lado del "charco".


Para empezar, me detuvieron cuando pasé las cosas que llevaba en la mano en el escanner y me dijo la senorita que tenía que revisar mi maleta, lo primero que sacó fueron mis medicinas y empezó el interrogatorio, como si llevara cosas prohibidas, pero con tan buena suerte que el médico que me está atendiendo, me dió una receta en español y otra en inglés, porque me dijo que a veces se ponían difíciles en los aeropuertos, nunca lo pensé pero asi fué, debo agradecer a Hari sus atenciones, pues además desde allá me está checando :)


El día 30 de mayo sali del D. F. se suponía que a las 9:30 p.m. pero como siempre, por una cosa u otra salimos una hora después, la cosa es que llegaría a Londres y allí cambiaríamos a un avión más pequeño hacia Amsterdam, con dos horas para pasar a revisión de pasaporte y maletas que lleva uno en la cabina, para lo cual tenía dos horas, pero con esa de retraso la cosa se iba a poner más difícil para hacer todo en solo una.


Con tan buena suerte que el vuelo duró una hora menos, asi que llegué a la hora que se suponía con mis dos horas para pasar todos los trámites.


Para ésto el llegar de un lugar a otro es muy largo, mucho que caminar, aunque hay tramos en que hay de esas cintas en los que se puede uno parar y lo lleva al otro extremo, total que cuando llegué a la famosa revisión de pasaporte en Londres, había una fila como nunca había visto, la mayoría eran indúes, que iban no se a donde, total que pensé que si me formaba simplemente no iba a tomar el avión. Asi que fuí con la señorita que estaba en le entrada y le dije que tenía que tomar un vuelo en poco tiempo y que si me formaba simplemente no iba a ser posible estar a tiempo.



Entonces me dijo que siguiera a una pareja, que ella ya les había dicho qué hacer asi que yo muy obediente los seguí, de pronto se metieron bastante adelante de la fila y pues allí voy yo también, de todos modos pasó mucho tiempo para pasar, pero nunca tanto como si hubiera estado al final de esa interminable fila.


De allí a correrle, porque de verdad las distancias dentro de los aeropuertos son impresionantes.

Llegué a la sala correspondiente y a los 10 minutos pastimos hacia Amsterdam, al revisarme el pasaporte me preguntó el empleado que cuánto tiempo me quedaría, cuando le dije que serían 3 meses me vió con desconfianza, le tuve que enseñar mi boleto donde está la fecha de regreso, le tuve que decir que venía a visitar a una hija y total, pasé.


Las maletas llegaron completas, pues hace dos años no llegó una, lo cual no deja de ser una molestia, pues uno ya quiere salir, no perder el tiempo llenando formas y pidiendo que se la envíen a uno, pero bueno, total que esta vez todo estuvo a tiempo y cuando salí estaba Lydia y Steven esperándome, Lydia como no sabe que no me gustan los chocolates jejejeje me recibió con dos cajas, para qué les platico lo rico que estaban, aunque todavía me quedan algunos :O.